martes, 28 de septiembre de 2010

la historia del desastre

si el hombre de uno en uno
ya resulta despreciable
qué cabe esperar de la masa
esa fuerza ciega que atropella
esa horda terrible que arruina
cuyo fruto ya lo sabes
es la historia del desastre
no busques cobijo en la bandada
no te asocies no te sumes
no te inscribas no aceptes
la verdad que zumba en el enjambre
no sigas otros rastros
no pises otras huellas
proyecta aunque duela tú solo
el sentido de tus pasos
aunque finalmente éstos
tampoco conduzcan a nada

sábado, 20 de febrero de 2010

Capitán de los piojos II

la piedra describió para mi asombro
con efecto una parábola perfecta
y justo la ventana en ese instante
tramó sus átomos con mala hostia
es posible que el viento de poniente
sembrara un principio de incertidumbre
no obstante sí yo lancé la piedra
pero ¿qué es el yo? ¿qué la piedra?
¿la ventana deja de ser ventana
al estar fragmentada en pedazos
o en cada esquirla minúscula
sobrevive cierta idea de ventana?
no está claro en cualquier caso
dónde teje su nido la culpa
por lo tanto no creo necesario
que se entere de esto mi madre